Turntable

Cómo cuidar tu tocadiscos

How To Take Care of Your Turntable

Los tocadiscos pueden parecer sencillos: el vinilo gira y suena música. Sin embargo, son dispositivos intrincados compuestos de numerosos componentes pequeños que deben funcionar con precisión. Dado que los tocadiscos son equipos analógicos, incluso variaciones menores pueden afectar significativamente su rendimiento. Por lo tanto, un mantenimiento regular de tu tocadiscos es crucial para preservar su calidad de sonido impecable y prolongar su vida útil.

El enemigo número 1 del vinilo: el polvo

El polvo no solo estropea el aspecto de tu tocadiscos; también puede afectar enormemente la calidad del sonido. El funcionamiento de los tocadiscos se basa en que la cápsula sigue los grabados microscópicos del disco, luego ocurre una especie de magia y ¡voilá!, suena la música. La cuestión es que el polvo en el disco o en la aguja puede impedir que el tocadiscos lea los surcos correctamente.

Por eso, limpiar rutinariamente tanto el tocadiscos como los discos es esencial.

Tocadiscos:

  • Procura mantener tu tocadiscos en un ambiente limpio.
  • Retírale el polvo con cepillos especialmente diseñados como los que ofrecemos en nuestro Kit de Vinilo 3 para limpiar suavemente la base y el brazo. Un cepillo pequeño y suave o un bote de aire comprimido pueden quitar el polvo de áreas de difícil acceso.
  • Limpieza del plato: antes y después de tocar discos, pasa un paño húmedo por el plato y asegúrate de secarlo bien. Evita productos químicos agresivos.
  • Mantén la tapa antipolvo bajada siempre que sea posible para evitar que se acumule polvo.

Discos de vinilo:

  • Desempolvar con regularidad. Usa un cepillo de fibra de carbono o de pelo de cabra para quitar el polvo antes y después de cada sesión.
  • Limpieza profunda ocasional. Para discos con mucho uso o mal almacenados, considera una limpieza profunda usando una máquina de limpieza de discos o una solución profesional con un paño. Por ejemplo, puedes usar el 'Record Clean' del Vinyl Kit 2.
  • Consejo extra: maneja siempre los discos por los bordes y SOLO por los bordes para evitar dejar huellas en las ranuras.

Asegúrate de que tu tocadiscos esté correctamente configurado

Un tocadiscos mal configurado puede causar saltos, mala calidad de sonido o incluso dañarlo. Asegúrate de seguir nuestra Guía de configuración detallada para garantizar la durabilidad de tu tocadiscos. Aquí te presentamos algunos puntos destacados de esa publicación en el blog:

  • El tocadiscos debe colocarse plano y nivelado.
  • Asegúrate de que el tocadiscos esté sobre una superficie que minimice las vibraciones lo máximo posible.
  • Lo ideal es montarlo en una estantería.
  • Asegúrate de que la fuerza de seguimiento esté configurada correctamente.
  • No coloques el tocadiscos demasiado cerca de los altavoces, ya que los graves potentes pueden afectar la calidad del sonido.
  • Ajusta el antideslizante a la configuración correcta.

Verificaciones mecánicas

Asegúrate de revisar periódicamente los componentes mecánicos, como la correa, la aguja, la cápsula de audio giratoria y el plato. Si alguno de ellos está dañado, considera reemplazar la pieza individual o el tocadiscos completo.